03 marzo 2008

Mi primer post

Bueno, para no olvidar lo que escribo, acá les dejo el primer post de este blog. Valga el ejercicio mnemonímico para tratar nuevamente el tema en días posteriores:
De la erótica verbal y la poética corporal
"la relación entre erotismo y poesía es tal que puede decirse, sin afectación, que el primero es poética corporal y la segunda es una erótica verbal" Octavio Paz (La Llama Doble)
Hablar de erotismo requiere de una profunda sacralización de las palabras. Un proceso íntimamente vinculado con la poesía y la forma en que esta erotiza el mundo circundante del escritor. No se habla del erotismo sin sentirlo. Y he aquí que el discurso de los erotómanos parece gestarse en los campos de la ilusión; el mismo, en donde han de habitar los incrédulos, locos, soñadores y demás "estúpidos" que se atreven a sentir. Y es que elevar la bandera del loco erótico requiere de una profunda conversión religiosa. Sólo la osada fe del creyente podrá vivir, describir, sentir, conocer, explicar y enseñar el cómo se puede sacralizar el cuerpo del otro y el propio, y poder vivir "para contarlo". Georges Bataille nos recuerda lo cercano que está el libertino del asceta (entiéndase que cuando hablamos de libertino nos hemos de referir al amante, es decir, aquel que ama y quien disfruta del placer sin reservas o culpas morales). Ambos se alimentan del mismo árbol del sexo; aunque con algunas diferencias. Mientras el asceta místico conduce su búsqueda a la unión con Dios o cualquier otro nombre con que se designe a la Divinidad, el libertino busca unirse al cálido cuerpo de su amante. Ambos parecen perseguir a un estado de éxtasis primigenio donde confluye TODA la verdad y razón del universo. Segundos donde el yo se desvanece y florece la unión perfecta. El instante del orgasmo es cuando en apenas unos segundo rozamos la mano de Dios. Lo que para el meditante se muestra por mayor tiempo y después de una incansable contemplación, para los amantes es posible encontrarlos en apenas unos segundos de unión erótica. Y he aquí que vivir desde el Eros, por el placer y para el placer, requiere que esta "religión" halle en la poesía su palabra. El poeta es el verdadero profeta del cuerpo, tocado por la "divinidad" porque todo acto creador implica un ejercicio divino. Ambos, el erotismo y la poesía, acuden a la imaginación como infinita fuente de placer, un placer que no se limita a los sentidos, un placer que va más allá del mero intercambio corporal. Cuando la imaginación actúa nace el arte, y el erotismo es un arte para la vida misma. Gracias a la imaginación las palabras cobran vida, tienen sentido y decimos que "nos llegan al corazón". La imaginación es la encargada de transformar el acto sexual en rito, ceremonia, religión. Gracias a ella superamos el instinto (ligado directamente a la reproducción pero de eso hablaremos en otra oportunidad) y lo convierte en erotismo. Por lo que podemos concluir que poesía y erotismo son uno de los actos "más humanos" que puedan existir, los más cercanos al hombre racional, y que dan cuenta de las posibilidades infinitas de la búsqueda del placer. En una oportunidad una amiga me comentaba, mientras leíamos un libro (o veíamos una película no recuerdo muy bien) que "esto es un momento orgásmico" y tenía toda la razón del mundo. Cuando podemos experimentar la intensidad del placer y transportarlo a una forma de vida, donde hasta el dolor puede ser gratificante, vives con menos hostilidades en el pensamiento, el alma y en el encuentro con el otro. Por ello, y aunque suene osado de mi parte, habré de confiar en quién lee a Paz, Sor Juana, Baudeliere, Girondo, Benedetti o Bataille, porque sé que jamás podrás pasar inadvertido ante sus escritos, y por lo menos, sé que eres capaz de sentir y de pensar. El resto me lo dirá el vaso de grappa, de ron o tequila que nos bebamos en el bar

5 Íncubos o Súcubos:

Anónimo dijo...

Blog invitado a participar en el concurso "Otro Blog mas".
Puedes visitar http://www.asi.com.ve y ver las bases del concurso.
Saludos.

J. L. Maldonado dijo...

He de decirte que si este fue tu primer "post", fue un debut magistral; el epígrafe de Paz, perfecto; rememorar a Baudelaire, Sor Juana, Bataille...preciso. Casi que digo "no tiene precio".
Muy bueno.

J. L. Maldonado dijo...

Gracias por tus comentarios en mis escombros.
Saludos...

La Hetaira dijo...

graciasss a ti por pasar...
hasta la próxima luna llena

J. L. Maldonado dijo...

Tus comentarios estuvieron mejores que mi post. Estoy de acuerdo contigo. Fíjate que leí El Mundo de Sofia, y me pareció extraordinario. No vi la película pero me comentaron que no estuvo a la altura del libro; en cuanto a la obra de Eco, fue a la inversa, vi la película que no el libro por tanto no puedo opinar. La relectura siempre será un nuevo viaje. Tengo en la cola a Siddharta, de Hesse, sólo El lobo estepario que siempre es un salto al vacío, leyéndolo y releyéndolo.